Autor: Faustino

Programa Nº 83 – LA IDENTIDAD RONDEÑA (II)

Apuntábamos en el programa anterior que no existe una forma de ser rondeño, por tanto cualquier calificativo al respecto hay que desdeñarlo por carecer de valor alguno. También comentamos que no existe un pueblo en España que se defina con mayor número de tópicos, estereotipos, prejuicios y clichés que el pueblo andaluz, y estos se repiten una y otra vez por propios y extraños. Todo ello debemos relativizarlos, pues esa imagen, como la Leyenda Negra, se construye en gran parte para denigrarnos. 

Existen muchos aspectos que pueden servir como identificativos de nuestra tierra y muy especialmente de Ronda y su Serranía. Nuestra Cultura y una larguísima relación de componentes, sin duda, es lo que mejor nos identifica. Uno de nuestros caracteres identificativos se relaciona con el Romanticismo, de la que nuestra tierra es uno de los iconos más preclaros de España. La imagen definitiva de Andalucía y de Ronda, de la que es pieza fundamental por lo que nuestra ciudad representa en el contexto andaluz, se forma durante el romanticismo europeo. Y esa imagen que se conforma en la época romántica, tomando a su vez otros elementos populares y tradicionales del XIX, trasciende incluso hasta hoy en día.

Es también en plena época romántica, primer tercio del siglo XIX, con la llegada de los románticos, con su voluntarismo claramente integrador, cuando empieza a despertarse el sentimiento de pertenecer a una entidad territorial común que ya se llama Andalucía. Esta se divide en provincias y nuestro término rondeño se ve claramente perjudicado, al dividirse en tres partes para adjudicárselas a tres provincias diferentes. Dentro de Andalucía hay diferencias culturales y sociales entre los diversos territorios que la componen, refiriéndonos al territorio como demarcación comarcal, y la nuestra es paradigma de todo ello.

Otro aspecto a tener en cuenta es la identificación de nuestra señas de identidad andaluzas con las de España, lo que supone una de las grandes aportaciones que Andalucía y Ronda ha hecho a España y al mundo, así es como lo entendemos.

Programa Nº 82– LA IDENTIDAD RONDEÑA (I)

Vamos a entrar en una temática muy poco tratada y analizada, la Identidad Rondeña, y que por ello poco se tiene en cuenta, cuando se trata de una cuestión que se ha ido conformando desde el pasado y que debemos tenerla muy presente, y ser muy conscientes de lo que somos o representamos.

Hablar de identidad de un territorio es hablar de su personalidad, de su imagen, de sus señas como colectivo. Y si algo caracteriza a Ronda es su personalidad, lo que la hace distinta y singular, y a su vez la convierte en tan atractiva. La personalidad es el rasgo más distintivo de cualquier territorio, que por ello es precisamente hermoso y diferente. Naturaleza y Hombre construyen conjuntamente una auténtica “Obra de Arte”, como todos estaremos de acuerdo es nuestra ciudad.

Y Ronda no solo es un paisaje, unos monumentos, unas calles, una Serranía… Ronda es mucho más, es una cultura, es una estética, es una historia. Una ciudad tres veces milenaria, excitante, fantástica y exótica, que ha aportado mucho a Andalucía y a España.

Programa Nº 81

LA II REPÚBLICA EN RONDA ( y V)

Concluimos con este episodio la serie de programas dedicados a cómo se desarrolló en el Ayuntamiento rondeño el periodo republicano.  El 28 de septiembre de 1934 se nombra como nuevo alcalde a D. Antonio Salcedo Berlanga, pero parece ser que la legitimidad de esta nueva Corporación, impuesta por decisión gubernativa, queda cuestionada desde el primer momento, lo que no ayudará a su mantenimiento y capacidad de actuación. Se producen dimisiones y renuncias continuas hasta que el 8 de enero de 1936, por resolución de nuevo del Gobernador Civil se constituye una Comisión Gestora para dirigir el Ayuntamiento. Un mes después, febrero de 1936, tiene lugar las elecciones generales que dan la victoria al Frente. Popular, constituyéndose después una nueva Corporación mayoritariamente de izquierdas, eligiéndose como alcalde a D. Salvador Badillo Jaén. Entre las primeras medidas que toma la nueva Corporación está la de declarar ilegales todos los acuerdos adoptados por las corporaciones anteriores y de sus respectivos alcaldes, constituidos desde el 28 de septiembre de 1934, hasta la fecha de la posesión de “este Ayuntamiento que es el que legal y legítimamente está constituido”.

Al poco dimite también D. Salvador Badillo, a la que sucede D. Antonio Serra Massaguer. Pero la inestabilidad no cesa y se siguen produciendo de nuevo más dimisiones y huelgas. El 15 de mayo se elige como nuevo alcalde a D. Juan Vera Palop, que tan solo dura una semana en el cargo, recayendo la elección del nuevo alcalde en D. Francisco Cruz Sánchez, que lo será cuando en España estalla la Guerra Civil, con una fuerte división entre los partidos de izquierdas mayoritarios en el plenario municipal rondeño.

LA II REPÚBLICA EN RONDA (IV)

En el anterior episodio nos quedamos en la lectura que se hizo en el pleno municipal, el 23 de mayo de 1933, del auto del juez de primera instancia e instrucción Ronda, por el que se decreta el procesamiento de D. Juan Peinado, y la suspensión del mismo en su cargo de alcalde y concejal del Excmo. Ayuntamiento de Ronda. En esta misma sesión se trató también el tema de la suspensión que el alcalde Peinado había decretado sobre el secretario de la Corporación D. José María Carande y Uribe por las faltas cometidas por éste que incluían la agresión al propio alcalde, y se acuerda por mayoría instruir expediente al secretario. Parece evidente que la situación estaba llegando a un punto extremo, fruto de las fuertes disensiones internas y de la presión externa.

Posteriormente, el alcalde accidental D. Antonio Serra Masaguer será también procesado judicialmente, se suceden plenos con continuos cambios de alcalde y ásperos debates, acompañados de abandonos del salón plenario y dimisiones, hasta tal punto que no se pudo renovar el Ayuntamiento después de las elecciones municipales de abril de 1933, dada las circunstancias adversas por las que atravesaba el Consistorio.

Ya el 27 de octubre de 1934, se nombran los concejales sustitutos de los suspendidos, por designación directa del Gobernador Civil, y toman posesión los electos. Siendo elegido como alcalde D. Antonio Salcedo Berlanga, que ya lo había sido con anterioridad, aunque en aquella ocasión fue obligado a dimitir.

Programa Nº 79 – LA II REPÚBLICA EN RONDA (III)

Continuamos con el relato de cómo se desarrolló el periodo republicano en nuestra ciudad, en la que los acontecimientos que se producen en el país tienen también su repercusión en Ronda y, por tanto, son tratados en las sesiones municipales. El historiador Francisco Ruiz ha sabido recoger lo que dicen estas actas municipales al respecto: la quema de iglesias en Málaga, el suceso de Casas Viejas, también en Arnedo, el Estatuto Catalán…

Pero el aspecto que más destaca del periodo será, sin duda, la enorme conflictividad interna de la Corporación Municipal. Las discrepancias internas comienzan a producirse muy pronto. Hay trasvase de concejales de un partido a otro, se pierde la mayoría para gobernar, se producen dimisiones en el seno municipal, existe un mal ambiente de continuas descalificaciones, insultos, denuncias, publicaciones insidiosas…

Alta tensión y radicalismo en las posturas de algunos miembros de la Corporación que, como podremos comprobar, es una constante en todo el bienio de 1931-1933. Y además, estos conflictos internos cada vez más parecen acrecentarse. 

LA II REPÚBLICA EN RONDA (II)

Tras la elección del nuevo alcalde republicano, don Juan Peinado Vallejo, el 21 de abril de 1931, se conformó el Pleno Municipal integrado por los siguientes partidos: Acción Republicana, Partido Republicano Radical Socialista, Partido Republicano Radical y Acción Nacional. 

Durante el bienio 1931-1933, se vivieron en Ronda las consecuencias de la crisis de 1929, por lo que las primeras medidas que se adoptan son las relativas a paliar las necesidades por las que pasa la clase obrera. Crisis que se ve agravada por la propia situación de penuria económica en la que se encuentra el Ayuntamiento, embargado por la propia Hacienda del Estado y que también afecta al importante sector comercial de la ciudad rondeña.

Se cambian nombres de calles acordes a la nueva realidad republicana, se crea una Oficina de Quejas, se proyecta una Biblioteca en la Alameda del Tajo, y se centra el mayor interés en las nuevas infraestructuras educativas, con la apertura de nuevos colegios e instituto de Segunda Enseñanza.

Iniciamos un nuevo ciclo de programas en los que vamos a tratar un periodo histórico del máximo interés y que todavía hoy despierta encendidos debates en nuestra ciudad. Sin duda, la época más convulsa y dramática de la historia de España que comienza con la proclamación de la II República y desemboca con la Guerra Civil y la posterior Dictadura franquista, vencedor de aquella guerra fratricida.

Recientes trabajos de investigación sobre este periodo en cuestión, arrojan nueva luz y amplían el conocimiento que teníamos sobre cómo se desarrollaron los hechos acaecidos en Ronda y la Serranía. Hablaremos de cómo llegó la República a Ronda, que desde tiempo atrás venía arrastrando serios problemas económicos, ya que la sociedad rondeña estaba claramente dividida entre burgueses (comerciantes, terratenientes e industriales) y obreros (trabajadores y campesinos). Trataremos también como se llevó a cabo la constitución del primer Ayuntamiento republicano, tras las elecciones del 14 de abril de 1931, en la que fueron vencedores los partidos de izquierda, aunque parece ser que el escrutinio tuvo que generar una situación conflictiva y poco clara que requirió de una intervención exterior para poder instaurar el nuevo Ayuntamiento, que no se hizo hasta el día 21 de abril, resultado elegido como alcalde D. Juan Peinado Vallejo. 

Con este episodio concluimos esta serie de programas dedicados a esta plaza tan emblemática e histórica de Ronda, que sin duda contiene los edificios más relevantes de la ciudad.

Y lo hacemos hablando en primer lugar del Convento de la Caridad, que en su origen fue una ermita fundada por Pedro de Miranda en el siglo XVI. Fue sede de la antigua Cofradía de la Caridad y desde 1925 alberga a las Hermanitas de la Cruz.

A principios del siglo XX se cede parte de este edificio a la “Sociedad Fomento de Industrias Clásicas y Escuela de Artes y Oficios de Alfonso XIII” para destinarse a Museo Arqueológico y Escuela de Artes y Oficios patrocinadas por la Duquesa de Parcent, con sus famosos talleres de Alfombras, Forja y Mueble Rondeño, que después se convirtieron en referentes del patrimonio artesano de nuestra ciudad, de gran fama y demanda nacional e internacional.

Esta Plaza Mayor de Ronda, en la actualidad, lleva precisamente el nombre de Duquesa de Parcent, reconocida unánimemente por haber sido una de las grandes benefactoras de nuestra ciudad, sobre la que comentaremos su extraordinaria labor social que la hizo merecedora, nada más y nada menos, de llevar el nombre de la plaza más emblemática y bella de Ronda.

Vamos a concluir nuestro relato sobre el colegio que se construyó en el solar del Castillo, que como ya dijimos en un principio fue regentado por los padres Agustinos e inaugurado el día de San Miguel, 29 de septiembre de 1903. Un año antes ya habían sido inauguradas las Escuelas Populares de Santa Teresa, de Primera Enseñanza, anejas al Palacio de Moctezuma y regentadas por Salesianos.

Una vez comentado suficientemente la historia del Castillo rondeño, pasaremos a hablar de otro edificio de gran relevancia en esta antigua Plaza Mayor, el edificio que actualmente alberga el Ayuntamiento de la ciudad. Se trata de un antiguo Cuartel de Milicias que fue construido en 1734 para albergar al Regimiento nº 27 fundado por el rey Felipe V.

En el frente oeste de la plaza, donde según la tradición se encontraba la cárcel en época musulmana, se ubica uno de los cenobios más antiguos de Ronda, el convento de Santa Isabel de los Ángeles. Fundado entre 1541-1542 por el matrimonio formado por Luis de Oropesa y Catalina Triviño, que lo dotaron de cuantiosas rentas y considerables censos, regentado por monjas de la Orden de Santa Clara y regla de San Francisco de Asís, conocidas popularmente como Las Clarisas. El edificio tuvo que ser ampliado en 1669 por el aumento cada vez mayor del número de religiosas, y a lo largo de los siglos sufrió numerosas reformas.

LA PLAZA MAYOR DE RONDA (III)

Seguimos hablando de esta plaza de tanta importancia en nuestra ciudad, nuestra antigua Plaza Mayor, que sin duda alberga los edificios más nobles de Ronda, entre ellos la Alcazaba o Castillo, del que comenzamos a hablar en el episodio anterior.

Hay que decir que el castillo-alcazaba de Ronda fue declarado Monumento Histórico Artístico el 5 de mayo de 1949 y más adelante, fue nombrado Bien de Interés Cultural en junio de 1985. Sin embargo, llama la atención el escaso estudio documental e histórico que existe sobre esta fortificación, con muy escasos también estudios arqueológicos, que curiosamente cuando se han hecho han dado un resultado espectacular como la aparición del molde de espada ibérico, una de las joyas de nuestro Museo Municipal.

Hablaremos durante este episodio de su estructura, la ruina en qué se convirtió, vestigios que aún quedan, su conversión en colegio de Agustinos, primero, y de Salesianos, después, y del estilo de este edificio ecléctico, etc…