Todo lo contado en los episodios anteriores y en la situación que quedan muchos de estos judeos-conversos en la España de la época, explica que debían de actuar con mucha precaución y aparentando que eran cristianos nuevos, para no ser acusados de herejes. Esta manera de actuar, disimulando sus raíces era muy común en la época, tanto para los españoles de origen judío como morisco que se quedaron a vivir en sus tierras de siempre y no optaron por el exilio.
El proyecto de llegar a las Indias por occidente era un viejo propósito del reino de Portugal de principios del siglo XV, pero siguiendo la ruta africana, es decir, circunvalando el continente negro que se suponía abierto. Y dejar para más adelante la exploración del océano Atlántico por el oeste (la ruta que siguió Colón). Para ello, la primera fase exigía tomar posiciones en el Estrecho de Gibraltar, llave natural de la navegación europea. La leyenda y la tradición popular siempre hablaba que más al sur y al oeste el mar se teñía de miedos, el cabo Bojador o cabo del Miedo (situado en la costa norte del Sahara Occidental, al sursudeste de las islas Canarias) era la puerta del Mar Tenebroso.
Cristóbal Colón nace en esas fechas, sobre 1451, en Castilla llevaba tres años reinando Enrique IV, hermanastro de Isabel la Católica; en Aragón, Juan II, padre de Fernando el Católico; y Ronda estaba en manos del reino nazarí de Granada, cuyo sultán era Muhammad X, al que sucede Abu Nasr Saad en 1454. Ronda era entonces una importante ciudad fronteriza del emirato granadino. Las relaciones del sultanato granadino con el reino castellano, era de sometimiento a los reyes cristianos en régimen feudatario, se alternaban las treguas y concordias y se sucedían los pactos.